Para quienes se han dado cita en la zona colonial de Santo Domingo con el interés de participar de la XXIV Feria Internacional del Libro Santo Domingo 2022, es muy probable que al recorrer la Calle Las Damas o visitar el Pabellón del Ministerio de Defensa, han podido percatarse de una serie de estatuas vivientes, alegóricas a famosos escritores e intelectuales.
Ante ellos, se teje la curiosidad de estudiantes de centros educativos como el Colegio Nuestra Señora del “Perpetuo Socorro de la Fuerza Aérea”, en cuyos rostros se refleja el asombro por el talento y el arte de estas imágenes que aunque inamovibles por momentos, están llenas de vida como es el caso de la estatua del narrador, columnista y crítico de arte Pedro Peix, a quien se le dedica este evento cultural.
También es posible ver la representación de Antonio Fernández Spencer, poeta, ensayista y diplomático dominicano, quien desde su silla se mimetiza y logra impregnar el lugar de una extraña sensación, que crea en los niños magia y aventura. Se trata de un grupo de artistas, que también representan a la escritora periodista, feminista y protectora de los derechos dominicanos, Carmen Natalia Martínez y al poeta narrador y publicita dominicano René del Risco Bermúdez.
En fin, se trata de un ambiente muy singular donde lucen ropas de color opaco, que en ocasiones son tragadas por la oscuridad. En ellos, es posible apreciar la combinación del olor a salitre por la cercanía del mar donde se celebra la feria y el aroma de café por las tardes, una experiencia que además se conjuga con la música de trovadores y artistas que se presentan a diario en el marco de la Feria.
