SANTO DOMINGO.- El ministro de Economía, Planificación y Desarrollo doctor Pavel Isa Contreras, felicitó al liderazgo militar dominicano por su excepcional contribución a la defensa y seguridad fronteriza, además de su preocupación y apoyo constante a los proyectos de desarrollo del gobierno dominicano, en la frontera domínico-haitiana.
Al abordar el tema «Políticas públicas y lineamientos estratégicos, sus implicaciones en la seguridad y defensa fronteriza dominicana «en el IX Simposio Internacional «Seguridad y Defensa Fronteriza: Retos y Desafíos», organizado por el Instituto Superior para la Defensa «General Juan Pablo Duarte y Díez» (INSUDE) del Ministerio de Defensa (MIDE), Isa Contreras informó que existen 900 proyectos de inversión pública, entre los cuales 90 son iniciativas de desarrollo fronterizo como parte de la estrategia MiFronteraRD, donde Fuerzas Armadas respalda con su experticia en asuntos de seguridad y defensa.
Entre los proyectos cuentan, un plan de desarrollo integral y otro de migración laboral, que pretenden la superación de brechas socio-económicas y el ordenamiento de los 17 mercados fronterizos localizados en Pedernales, Jimaní, Carrizal y Bánica. Enfatizó que con el término «seguridad para el desarrollo», el Gobierno «combina políticas de generación de oportunidades para la calidad de vida de la población de la zona fronteriza».
Isa Contreras también explicó los componentes para gestionar la mano de obra extranjera demandada en el Proyecto Turístico de Cabo Rojo: creación de las oficinas de migración laboral, creación de una bolsa de empleo, priorización de la oferta de trabajo de Pedernales, región Enriquillo y resto del país, por ese orden (anillos de inclusión social). Por igual, la regulación de mano de obra extranjera para las vacantes que no sean llenadas por dominicanos.
En cuanto a la posibilidad de brindar acceso a servicios básicos y medios de vida en 50 comunidades en pobreza extrema, mantener y repoblar asentamientos humanos en la frontera, refirió el ministro Isa Contreras, se impulsan 11 proyectos de electrificación rural para 1,375 beneficiarios, a quienes también se dota de internet satelital, vivienda, acueductos comunitarios, así como prevención de salud y educación nutricional.
Importancia de un gobierno y FFAA responsables
“Mientras exista un gobierno responsable y unas Fuerzas Armadas comprometidas con la defensa de los intereses nacionales en República Dominicana, aquí siempre existirá una frontera segura para todos los dominicanos”, concluyó enérgicamente su ponencia el general de brigada Mauricio Cabrera Rizek, director del Cuerpo Especializado en Seguridad Fronteriza y Terrestre (Cesfront) del MIDE, en el marco del simposio.
“El hecho de que un país, permita que ciudadanos extranjeros ingresen a desarrollar sus actividades económicas, sin ningún tipo de documentos y permita que compren sus alimentos que en su país son escasos, es el mayor acto humanitario que un país puede hacer por otro, a sabiendas que Haití está sumergido en una crisis cada día más profunda”, señaló.
“La República Dominicana está utilizando los legítimos elementos del poder nacional, es decir el político, económico y el militar para lograr las resiliencias estratégicas frente al caso Haitiano”, dijo al referirse y señalar con preocupación la existencia de bandas criminales al otro lado de la frontera.
Por otro lado, Iván Gatón, docente de la Facultad de Ciencias para la Seguridad, Defensa y Desarrollo Nacional del INSUDE, al disertar sobre la «Visión histórica geopolítica de las migraciones trasnacionales», refirió que la migración ha sido algo natural de la especie humana, y que en un mundo globalizado, se ha impuesto una visión geopolítica de conflictos por recursos y mantenimiento de intereses particulares de los actores principales de la política internacional, en detrimento de una población mundial sometida a guerras y las amenazas del cambio climático o situaciones que les obliga a abandonar sus lugares de origen.
Al referirse a la situación de Haití, dijo que el desafío es sumamente complejo, y que “requerirá que esos 391 kilómetros de frontera terrestre sean tomados en consideración, como el espacio que determinará, el futuro de los dos países que comparten la Isla la Española, si no se toman en consideración desafíos de seguridad, como la posibilidad del crecimiento del islam radical, las asimetrías económicas y muy especialmente el desafío medio ambiental.
“Sobre el futuro de la República Dominicana, se cierne un desafío de unas proporciones que ponen en jaque a las élites políticas y económicas, que necesitan una visión más clara de los desafíos que se ciernen sobre el futuro del país, así como tomar acciones que muestren una visión común de destino del país”.